El Miércoles de Ceniza marca el inicio del camino con Jesús, para el perdón, el arrepentimiento y la penitencia, como también, el de la Cuaresma, Tiempo que nos llama a promover cambios concretos en nuestra vida humana y espiritual para renovar la fe, la esperanza y la caridad que promovemos desde la Orden Hospitalaria a través del servicio, acogida y asistencia a los enfermos y personas vulnerables al fiel estilo de San Juan de Dios.
Con reflexiones como: “40 días para humanizarse”, se desarrollaron actividades litúrgicas en cada uno de los centros de la Provincia San Juan de Dios de América Latina y El Caribe, en las que participaron nuestros Hermanos Hospitalarios, personas asistidas y colaboradores de las áreas médico asistenciales, administrativas y generales; quienes con estas palabras expresadas por los celebrantes: “Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás”, recibieron la imposición de las cenizas. Esta celebración, es un llamado de la Iglesia Católica a la conversión y a la preparación para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en la Semana Santa.
La reflexión del evangelio nos dice: “La conversión es una actitud permanente del cristiano. Es el esfuerzo del hombre por dejar su vida de pecado y unirse más íntimamente a Dios; es aceptar día con día la propuesta de Jesús de vivir conforme al amor, y dejar que nuestra vida sea conducida de manera total por el Espíritu Santo; es responderle al Padre, como María Santísima, con un “sí” diario a su amorosa voluntad, a pesar de que ésta no siempre se adecúa a la nuestra”.
Portar las cenizas en la frente, es una muestra de arrepentimiento y un compromiso para cambiar y renovar la fe, estas cenizas son producto de la quema de las palmas que fueron bendecidas en el Domingo de Ramos del año anterior.