Queridos hermanos:
Al finalizar nuestra presencia en el 70º Capítulo General de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, es nuestra voluntad compartir con ustedes nuestro sentimiento de profunda gratitud a Dios y a todos los hermanos. Gracias por habernos hecho partícipes y ser coautores de las reflexiones en este Capítulo, en representación de todos los colaboradores.
Regresamos a nuestras Provincias, con mucha emoción, fuertemente conscientes del trabajo que se requiere por parte de Hermanos y Colaboradores, para que la sostenibilidad y la transmisión del Carisma de la Hospitalidad en un mundo cambiante, sea más visible y coherente en todos los ámbitos.
Abrazamos con entusiasmo, confianza y valentía todos los desafíos que los tiempos plantean, dispuestos a caminar juntos por un camino de plena realización de la hospitalidad, y los invitamos a acompañarnos con el corazón y la mente abiertos acogiendo nuestro sentir.
Ahora queremos expresarles nuestros deseos y esperanzas para el futuro:
- Consideramos valioso impulsar un modelo de gobernanza que se practique de manera coherente al Carisma y que refleje corresponsabilidad, que se aplique y se evalúe sin perder nuestra esencia. Que promueva sinergias y un mayor intercambio de conocimiento y experiencias globales, sin fronteras.
- Queremos que se fortalezca la identidad global de la familia hospitalaria, creando una marca corporativa común como organización sanitaria y social mundial, ante la sociedad, y, asimismo, una marca empleadora, ante estudiantes y colaboradores, atrayendo y fidelizando el talento humano.
- Necesitamos una auténtica renovación carismática, profundizando en la formación de hermanos, colaboradores y voluntarios, para que trabajemos juntos y avancemos con honestidad, guiados por el Espíritu de San Juan de Dios para el beneficio de sus obras. Conscientes de nuestra historia y cultura, adaptándonos a los nuevos tiempos, pero garantizando nuestra identidad carismática. No podemos dejar de fortalecer nuestros pilares y todo lo que nos hace diferentes, la Pastoral, la Bioética y Gestión Carismática.
- Necesitamos hacer frente colectivamente y actuar preventivamente ante situaciones de crisis.
- Queremos que se fomente el desarrollo y reconocimiento de vocaciones hospitalarias, que se practique estrategias de mentoring y se dé continuidad a las Obras de San Juan de Dios. El Espíritu Santo obra de múltiples y diferentes maneras.
- Queremos que se fomente un liderazgo colaborativo.
- Queremos que se fomente la búsqueda de soluciones innovadoras en la atención de las vulnerabilidades, lo que incluye fomentar la investigación, la aplicación humanizada de nuevas tecnologías, la educación en salud y las buenas prácticas medioambientales.
- Queremos que se aplique modelos de atención que fomenten la mejora continua en todos sus procesos, que refuercen la práctica bioética y pastoral, la importancia de la voz y experiencia de los asistidos, y que promuevan la prevención, la promoción de la salud y la atención más cercana a la comunidad. Acompañemos a los enfermos y más necesitados.
- Consideramos valioso tener un honesto y sostenible compromiso para que las orientaciones que se desprendan del Capítulo sean insumo prioritario para todas las provincias.
- La Orden es vida, les pedimos que tengan confianza en Dios. Los colaboradores estamos con ustedes, para enfrentar juntos los desafíos en este mundo cambiante. Somos parte de esta Misión y queremos ampliarla para llegar a más personas que lo necesiten.
Que el Espíritu Santo siga iluminando los trabajos del Capítulo General y la elección del nuevo Gobierno General.
¡Tengan Fe, confianza y audacia!